En este informe, que pretende analizar la influencia de las alteraciones del sueño en la siniestralidad laboral vial, se apuntó que las alteraciones del sueño, el cansancio y la fatiga están presentes en el diez por ciento de este tipo de siniestros laborales.
De esta forma, los accidentes laborales relacionados con el tráfico tienen una frecuencia «relativamente elevada», según el informe, que destacó que «sobre todo son más graves y virulentos», de manera que este tipo de accidentes representa casi el 40 por ciento de los accidentes laborales mortales y supone el 28,3 y 18,5 por ciento de los accidentes laborales muy graves y graves, respectivamente.
Según indicó Mapfre en una nota, el informe del Instituto de Seguridad Vial de Fundación Mapfre analiza el perfil del afectado por accidente de tráfico laboral cuando existe una patología del sueño, principalmente apnea del sueño y somnolencia diurna. En estos casos, la persona que presenta mayor riesgo es un hombre de entre 36 a 50 años, separado o soltero, que duerme generalmente menos de seis horas y trabaja en una empresa grande –con más de 1.000 empleados– con jornada continua.
Destaca también que la accidentalidad aumenta entre trabajadores de empresas que no han realizado la evaluación de riesgos laborales.
No obstante, según este estudio, «dormir mucho tiempo tampoco es un seguro para evitar este tipo de accidentes, ya que se ha demostrado que en las personas que duermen más de ocho horas este riesgo aumenta, circunstancia que puede estar relacionada con la hipersomnolencia diurna». Además, si se toman fármacos de forma regular, las posibilidades de tener un accidente de tráfico en horario laboral son mayores.
El estudio apuntó que los martes y los jueves son los días más críticos y en los que se producen más accidentes laborales de tráfico.